La seguridad privada juega un papel central en la sociedad actual. Para que los negocios, hogares o personas se sientan protegidos necesitan contratar seguridad privada. Hoy en día, este servicio tiene diferentes áreas y cada una se enfoca a objetivos diferentes. Es una profesión que tiene tantas especialidades y cuenta con empleados muy capacitados para realizar la tarea que se le asigna. Garantiza así la mayor tranquilidad posible en cuanto a la protección de bienes, propiedades o personas.
Si bien la seguridad privada no puede actuar para proteger a las personas como la seguridad pública, puede intervenir en delitos para evitar que una empresa sea atacada o robada y remitir el asunto a las autoridades correspondientes.
La seguridad privada es una profesión amplia en cuanto a las oportunidades que ofrece en su trabajo. Hay diferentes tipos de guardias a los que unirse. Entre ellos se pueden mencionar los siguientes:
En eventos donde se reúnen grandes multitudes, la seguridad es esencial. Aquí, los guardias tienen la tarea de mover a las personas, controlarlas y garantizar la seguridad de las instalaciones y sus residentes.
La seguridad del vestíbulo es donde hay un guardia de seguridad estacionado en el vestíbulo o frente al edificio para responder rápidamente a las violaciones de seguridad. Además, le corresponde el seguimiento y vigilancia para prevenir delitos.
Este tipo de seguridad consiste muchas veces en cuidar de quienes necesitan protección. Esta situación les sucede a personas que ocupan altos cargos en el estado, personajes famosos o empresarios importantes. Los guardias deben poder brindarles la protección necesaria en situaciones peligrosas